domingo, 20 de septiembre de 2009

Septiembre

Mirando la gente en la calle descargando mercadería. En un café. El verano se cerró con un portazo de lluvia y empezó el frío. Tres hombres en el metro leían el periódico Qué que en la portada de hoy decía: “Comemos lo que podemos pagar.” Una chica se sostenía la boca para no soltar la risa, una risa solitaria, esas que se tienen con el libro entre los ojos. Empezaron las clases y fui a mi examen de catalán. Hay gente de oficina en la calle. Las conversaciones son apuradas y de negocios entre relojes. Los pasos son con rumbo decidido bajo presión. Guardamos la diversión para los viernes y cierta melancolía para los domingos; los sábados son ese tironeo entre uno y otro. Septiembre es un gran lunes, un lunes de treinta días.